El empresario estadounidense Paul Salo ha expresado su deseo de recaudar alrededor de 1,5 millones de dólares con el fin de recrear los ataques del 11 de septiembre de 2001 contra el World Trade Center de Nueva York (EE.UU.) y poner a prueba las teorías de conspiración en torno al atentado.
Salo, que reside actualmente en Tailandia, ha afirmado que para la realización de este plan es necesario adquirir un avión Boeing 747 y destrozarlo contra un edificio vacío en un campo a una velocidad de alrededor de 800 kilómetros por hora.
De acuerdo con la propuesta de Salo, el proyecto podría financiarse gracias al dinero recogido por micromecenazgo. Además, el empresario propone vender a 5.000 de dólares las entradas para quienes deseen presenciar "en primera fila" la prueba, que tendrá lugar en Tailandia.
En un video que el empresario publicó en YouTube, Salo afirma que si durante la prueba en el edificio "solo se produce un agujero lleno de humo y no pasa nada más, prácticamente se sabrá que todo fue un engaño". "Por supuesto, algunas personas podrían molestarse, pero merecemos averiguar qué sucedió", concluye.