La población del condado de Hood River, en el estado de Oregón (EE.UU.), aprobaron con un 68% de votos a favor una medida que permite impedir de manera eficaz el plan de la compañía Nestlé de embotellar agua en la localidad de Cascade Locks, informan medios locales.
Durante siete años, Nestlé ha buscado la forma de embotellar el agua de Oxbow Springs, que recoge el líquido elemento de las colinas sobre las que se asienta Cascade Locks. El objetivo de la compañía ha sido construir una planta embotelladora de 50 millones de dólares en el puerto fluvial de la ciudad que produjera cerca de 380 millones de litros de agua embotellada anuales.
Sin embargo, este proyecto de Nestlé se ha enfrentado a la oposición local desde el principio tanto en el ámbito medioambiental como político. Algunos se muestran en contra del volumen de residuos que implica vender agua en botellas de plástico, mientras que otros ven en el proyecto un plan de Nestlé para privatizar los recursos naturales en beneficio de la corporación.
Por otra parte, quienes están a favor de Nestlé ven el interés de esta compañía por instalarse en Cascade Locks como una gran oportunidad para la economía de la localidad, que lleva décadas luchando por abandonar la depresión económica provocada desde que se resintiese la industria maderera del estado de Oregón.
El portavoz del Nestlé, Dave Palais, compareció ante la prensa el pasado martes para constatar el "desagrado" de los jefes de la compañía, sin revelar cuáles serán sus planes en Oregón. "Creemos firmemente que esta decisión no es lo que más interesa a Cascade Locks, pero respetamos el proceso democrático de esta resolución", declaró.