Un estudio de la oficina del Inspector General Especial para la Reconstrucción de Afganistán (SIGAR, por sus siglas en inglés) divulgado el pasado 30 de abril indica que las listas de militares del país asiático están repletas de soldados muertos o nombres falsos, informa la BBC.
Este hecho confirma que, tras invertir más de 60.000 millones de dólares en los últimos 14 años en la formación y adiestramiento del Ejército afgano, ni Estados Unidos —cuyo Congreso debatirá el asunto— ni sus aliados conocen cuántas fuerzas tiene ese país en realidad.
Las fuerzas de seguridad de Afganistán están completamente financiadas por la comunidad internacional. Sin embargo, estos 'soldados fantasma' son un grave problema de las zonas que luchan contra los talibanes y, en muchos casos, los oficiales superiores de Policía no los sustituyen y se quedan con el dinero que les correspondería.
Ya en enero, el consejo de la provincia sureña de Helmand, indicó que el 40 % de las fuerzas registradas en el país no existen.