"Lo que hace que Brasil sea diferente en términos de sus medios de comunicación es que las organizaciones de medios más grandes están casi en su totalidad en manos de un número muy pequeño de familias" que tienen "vínculos muy estrechos con la clase política, intereses políticos claros que no coinciden con los intereses de la población en general".
Lo afirmó el periodista Glenn Greenwald, famoso por su colaboración con el denunciante de la CIA Edward Snowden, en un evento celebrado este jueves en Río de Janeiro sobre la manipulación que llevan a cabo los grandes medios de comunicación y la situación política actual en Brasil.
Al referirse a la presidenta suspendida Dilma Rousseff, Greenwald afirmó que está claro que "los medios de comunicación de forma conjunta están totalmente a favor del juicio político" que se adelanta en contra de la mandataria. "La semana pasada se filtró una grabación del principal senador de la oposición y uno de los nuevos ministros en la que dicen que los medios de comunicación insistieron en la destitución de Dilma", agregó.
El ganador del Pulitzer también hizo hincapié en el presunto papel de EE.UU. en el golpe de Estado en Brasil de 1964 y en que ahora hay una "relación mucho más estrecha entre Washington y el nuevo Gobierno de lo que era entre Washington y el Gobierno electo" de Dilma Rousseff.