El canciller chileno, Heraldo Muñoz, confirmó la noticia al señalar que "por instrucción de la presidenta" Bachelet la demanda fue presentada ante el tribunal de Naciones Unidas. El objetivo que busca el Gobierno de Santiago es que la justicia "determine que el Silala es un río internacional y que Chile tiene derechos sobre las aguas".
Por este motivo, Muñoz sostiene que su país tiene "derecho equitativo y razonable" a utilizar los cursos fluviales que emanan del Silala así como Bolivia "tiene la obligación" de prevenir la contaminación de las aguas e informar a Chile de cualquier daño que lo afecte.
[Noticia] #Chile demanda a Bolivia ante la Corte Internacional de La Haya por el Río Silala https://t.co/Cc9OsSB72Rpic.twitter.com/e5PKe9ZDh2— Cancillería Chile (@Minrel_Chile) 6 de junio de 2016
Bachelet agregó que se ha decidido "tomar la iniciativa" porque "creemos que han habido muchas acusaciones".
La agente de esta demanda es la máxima responsable de la Dirección de Fronteras y Límites, Ximena Fuentes.
De esta forma el Gobierno chileno se anticipó a La Paz, que había anunciado en marzo que también llevaría el conflicto a la corte de La Haya. Bolivia exige un pago retroactivo por el uso que el país vecino ha hecho de esas aguas durante un siglo.
¿De dónde viene el conflicto?
El Silala se encuentra en el departamento boliviano de Potosí, a cuatro kilómetros de la frontera con Chile. De allí surgen una serie de canales que llevan agua al árido norte chileno.
Bolivia plantea que se trata de un manantial. Según el Gobierno de Evo Morales, los canales que cruzan la frontera son artificiales y fueron construidos en 1908 por una empresa de ferrocarriles. Siempre según la versión de las autoridades bolivianas, esta compañía obtuvo la concesión por 99 años pero la misma fue revocada en 1997.
Por su parte, Chile asegura que se trata de un río internacional, que nace en Potosí, cruza la frontera y desemboca en el río San Pedro de Inacaliri, en la cuenca hidrográfica del Pacífico.
En 2009 ambos gobiernos se sentaron en la mesa de negociación para alcanzar un acuerdo que incluía el pago por el 50% de las aguas utilizadas. Sin embargo, aquel diálogo también es motivo de controversia. Santiago afirma que nunca se firmó ningún texto debido al rechazo de algunas comunidades potosinas. Por su parte, desde La Paz sostienen que fue la delegación chilena la que se retiró antes de tiempo.
Finalmente, si bien Chile ha negado que tenga relación con este diferendo, recientemente ha instalado una moderna base de las Fuerzas Armadas muy cerca del Silala. Bolivia denuncia que hay una ligazón directa entre este despliegue militar y el conflicto.