Al menos 13 niños mueren atrapados en una tormenta en un lago en Rusia

La noche del sábado un grupo de 51 personas, en su mayoría niños de entre 12 y 15 años, quedó atrapado en una tormenta en el lago Syamozero en la República de Carelia, Rusia.

Un grupo de 51 personas navegaba este sábado 18 de junio en un lago a bordo de embarcaciones. Entre ellos había adolescentes de 12 a 15 años con acompañantes. Por la noche, los niños que se encontraban en 2 botes se vieron atrapados en una tormenta.

Como resultado del naufragio murieron 13 niños, según afirmó el jefe de Carelia, Alexánder Judilainen, informa RIA Novosti. "Trece niños murieron y otro más aún no ha sido encontrado", declaró Judilainen, que agregó que la búsqueda continúa.

Nueve niños y dos adultos fueron rescatados, informó el servicio de prensa del centro regional del Ministerio de Emergencias. Actualmente cuatro personas permanecen desaparecidas y los demás lograron salvar su vida nadando hacia las costas de las islas del lago.

De acuerdo con datos preliminares, los niños llegaron al campamento de verano desde Moscú, afirmó en su cuenta de Twitter el alcalde de la ciudad. Representantes de las autoridades de la capital rusa, psicólogos y médicos se han dirigido al lugar de los hechos. 

Tras la tragedia en la región se ha decretado que el 20 de junio será un día de luto.

Asimismo, el Comité de Investigación de Rusia abrió una investigación criminal tras la muerte de 12 personas en el lago. Cuatro sospechosos fueron detenidos y los investigadores están trabajando con ellos. La pregunta principal es por qué se realizó la trágica excursión si en la víspera los servicios meteorológicos advertían sobre las condiciones climáticas adversas para el sábado.

Actualmente se están tomando medidas para localizar y arrestar a dos personas más vinculadas a la tragedia y que se esconden de la investigación, así como a los demás responsables de la organización de las vacaciones de los niños en el campamento de verano 'Park Otel Syamozero'.

Tras la tragedia, el presidente ruso Vladímir Putin ordenó detectar las causas y prestar ayuda a las víctimas y familiares de los niños fallecidos. El líder ruso se mantenía al tanto de la operación de rescate, y se comunicó varias veces con el ministro de Situaciones de Emergencia, Vladímir Puchkov.