A mí me parece aventurado asegurar que el resultado del 'Brexit' vaya a provocar la inmediata recuperación de las Malvinas por parte de Argentina
El triunfo del 'Brexit' en el referendo para separarse de la Unión Europea (UE) causó un sacudón en el Reino Unido que se sintió hasta en el Atlántico sur.
Pasadas apenas unas horas luego de oficializarse el resultado, trascendieron preocupaciones que los isleños ya habían expresado sobre el impacto en la economía de ese territorio de ultramar reclamado soberanamente por Argentina.
La salida del Gran Bretaña de la UE causará, en primer término, "que se anulen en Malvinas los tratados que les permitían a los isleños exportar a Europa sin ningún tipo de barreras arancelarias", dice una nota del portal Perfil.
El texto cita a la delegada de Malvinas en Londres, Sukey Cameron, que previo al referendo presentó un informe ante la Cámara de los Comunes prendiendo las alarmas: "el 70 % del Producto Interno Bruto (de las islas) depende del acceso a la UE. Un cambio que restrinja el acceso de nuestros productos al mercado común europeo podría ser catastrófico".
Otro elemento quizá más alarmante para los kelper —como llaman en Inglaterra a los habitantes de estas islas— supone un escenario en el que la UE retire su apoyo en bloque y Argentina tenga un campo político más favorable en su reclamo territorial.
"Tenemos que estar alerta. Quizá, en poco tiempo, la Unión Europea decida que sus intereses son ahora acceder a la demanda argentina por las islas", escribió para 'The Telegraph' Julián Thompson, excomandante de la Brigada de la Royal Marine durante la guerra de las Malvinas.
La discusión de fondo
"A mí me parece aventurado asegurar que el resultado del 'Brexit' vaya a provocar la inmediata recuperación de las Malvinas por parte de Argentina por dos razones de peso. En primer lugar, porque la discusión de fondo es económica y, en segundo término, porque el Gobierno de Mauricio Macri no tiene el reclamo de ese territorio como tema importante de su agenda", comentó el corresponsal argentino Marcos Salgado durante una entrevista con RT.
Salgado agegó que Macri quizá mantenga las formalidades diplomáticas para cuidar el frente interno, pero de seguro no será tan fuerte en la exigencia como el Gobierno de Cristina Fernández.
Sobre la razón económica, el periodista se refiere al reciente anuncio realizado por la empresa británica Rockhopper Exploration, en el que confirma el hallazgo de un importante yacimiento petrolero al norte de las islas Malvinas. En ese territorio insular viven unos 3.000 civiles y cerca de 2.000 efectivos militares ingleses.
Colaboración
En el aspecto político, Salgado explicó que la política exterior del actual Gobierno argentino se parece más a la actitud colaboracionista de Carlos Menem. Todavía la prensa argentina, de cuando en cuando, recuerda mensajes escritos por el hoy presidente, en los que señalaba: "Las Islas Malvinas serían un fuerte déficit adicional para la Argentina. Nosotros no tenemos un problema de espacio, como tienen los israelíes".
Recientemente, la canciller argentina, Susana Malcorra, en un gesto interpretado como un giro respecto a la política exterior del kirchnerismo, anunció que Macri busca un acercamiento con los isleños. "Hay que generar una confianza mutua que permita que nos demos la mano sin tener reservas el uno con el otro", dijo Malcorra el pasado 24 de junio en Naciones Unidas.
Salgado agregó que, en su país, "Malvinas es un reclamo nacional, pero desde la época de la guerra se entendió que nada se va a recuperar en términos militares. Si bien sigue siendo una causa de todo el país, no existe actualmente una presión de la opinión pública sobre el Gobierno para recuperarlas y tampoco es un tema principalísimo de la agenda política".
Largo proceso
Lo que si queda claro, al menos para el intelectual argentino Atilio Borón, es que no hay soluciones inmediatas alrededor del reclamo de su país por la soberanía de Malvinas. Pero si antes el tema estaba clausurado, ahora podría comenzar a abrirse alguna posibilidad.
Consultado por RT explicó que, luego del referendo y en la medida en que el Reino Unido queda debilitado por esta decisión, "tanto económica como políticamente en el plano doméstico, y en lo exterior con una relación tensionada con la Unión Europea, se abren mejores posibilidades para avanzar en la lenta recuperación de las Malvinas, algo que no sucederá sino a través de un largo proceso".
Sin embargo, Atilio Borón cree que "ligazones entre los grandes capitales británicos, la City de Londres y el macrismo son muy fuertes" y ese aspecto hará siempre que el actual Gobierno actúe de forma moderada respecto de Malvinas. Para Macri "es una cuestión secundaria".
Ernesto J. Navarro