Al menos 37 personas han muerto y otras 65 han resultado heridas tras una explosión que se ha producido al norte de la capital iraquí, Bagdad, informa el canal de televisión Al Arabiya.
De acuerdo con los informes, el ataque se produjo en la ciudad de Balad, cerca del santuario chií de Sayyid Muhammad bin Ali al-Hadi. En el lugar primero ha sido detonado un coche bomba y luego combatientes de grupos armados atacaron a los peregrinos que llegaron a la localidad para tomar parte en el festival Eid al-Fitr, que marcan el final del mes de ayuno musulmán del Ramadán.
Según reportan los medios locales, las fuerzas de seguridad han logrado eliminar a los atacantes y ahora la situación está bajo control.
El grupo yihadista, el Estado Islámico, ha reivindicado el atentado.
El ataque se produjo apenas días después de otro atentado perpetrado por el Estado Islámico en un concurrido mercado de Bagdad. Anoche el número de muertos en la masacre se acercó a 300 personas, que lo convierte en un ataque más mortífero en Irak desde la invasión de EE.UU. en el 2003.