¿Suspensión del facto? Mercosur aún no traspasa presidencia a Venezuela
Ni sí ni no. Vencido el plazo puesto por el canciller uruguayo, Rodolfo Nim Novoa, para decidir sobre la transferencia, es incierto si Venezuela tendrá la presidencia pro témpore de Mercosur.
Este viernes, el presidente de Uruguay, Tabaré Vásquez, informó que "por el momento", no hay "una posición unánime" en el bloque respecto al traspaso a Venezuela, y que las posiciones siguen siendo las mismas, refiere Informe21.
Uruguay es el único país que ha manifestado su disposición para el traspaso. Brasil y Paraguay dicen que no; y Argentina, de manera ladina, se ha plegado tácitamente al bloque que se opone a transferir el mando.
En una entrevista ofrecida este viernes a Reuters, el ministro de Exteriores del gabinete de facto de Brasil, José Serra, aseguró que había sido un "error" de los sucesivos gobiernos de Luiz Inácio Lula Da Silva y Dilma Rousseff apoyaran la adhesión Venezuela al bloque, al tiempo que reiteró su negativa de permitir el traspaso de la presidencia.
"(Venezuela) no debe asumir la presidencia", dijo Serra, quien acusó a Lula y Rousseff de haber incurrido en "populismo internacional" al firmar la adhesión de Caracas al bloque.
La noche del pasado jueves, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, se pronunció al respecto: "la derecha y oligarquía latinoamericana, en una especie de triple alianza, pretenden secuestrar a Mercosur", dijo Maduro, citado por VTV.
La posición de Venezuela, en la figura de su canciller, ha sido la de exigir el traspaso sin condicionamientos, de acuerdo a lo establecido en los Tratados de Asunción y Ouro Preto. Las únicas reglas en esos documentos es que la presidencia se transfiera cada seis meses y se haga por orden alfabético.
Fuentes consultadas de la cancillería venezolana, que han mantenido cautela respecto al avance de las negociaciones, consideran que el traspaso inmediato es lo más saludable para el bloque porque, de no efectuarse, significaría una suspensión de facto para Caracas que obligaría al país caribeño a reconsiderar su posición en el mecanismo.
De hecho, el pasado lunes la jefa de la diplomacia venezolana expresó: "Cualquier cosa distinta (a la transferencia de la presidencia pro témpore) nos colocaría en la violación de los acuerdos constitutivos del Mercosur".
El viraje a la derecha de tres de los miembros de Mercosur pone a Uruguay en una posición incómoda: conciliar con ellos, por vía diplomática, para que Venezuela ejerza su derecho a la presidencia en el bloque; o violar los Tratados y actuar en contra del país que le suministra, en condiciones de pago ampliamente ventajosas, buena parte del petróleo que consume.
Nazareth Balbás