El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha declarado este viernes que el cambio de poder en Siria debe ser el resultado de unas elecciones, ya que, de lo contrario, el país corre el riesgo de repetir el destino de Libia, informa TASS.
"Los socios dicen: 'vamos a resolver el problema de Libia, Siria e Irak, vamos a organizar elecciones y erradicar el terrorismo'. Dicen: 'Primero hay que quitar a [Bashar] Al Assad y después vamos a luchar contra el terrorismo'. Nosotros decimos: 'De acuerdo, vamos a organizar urgentemente elecciones en Siria y Al Assad será eliminado a través de las elecciones'. ¿Pero quién garantiza que en Siria no vaya a pasar lo mismo que en Libia?", ha planteado.
Lavrov ha destacado que la destrucción y violación del equilibrio étnico y confesional, que, a pesar de las guerras sangrientas, se mantiene en Siria, supondría una desgracia para todos.
"Si no está roto, no lo arregles"
Lavrov recordó un dicho estadounidense para hacer un símil con la situación: si no está roto, no lo arregles. "Irak no estaba roto, Libia no estaba rota, Siria no estaba rota (…), se pusieron a 'arreglarlas' y ha salido lo que ha salido", afirma.
Después del derrocamiento de Muammar Gaddafi, Libia se hundió en el caos, intensificándose el sentimiento separatista. "[En Libia] también había un líder autoritario que no gustaba, pero con él no había ningún tipo de terroristas", ha apuntado el ministro. "Y cuando lo derrocaron, Libia se convirtió en un semillero de terrorismo en un país a través del cual al sur, a África, pasan militantes y armas y al norte van esos inmigrantes que preocupan a Europa", explica.
El ministro indica que para resolver la crisis y detener el flujo de refugiados es necesario restablecer el orden en los países de origen, es decir, Irak, Afganistán, Libia, Siria y Yemen.
La situación en Oriente Próximo, resultado de una actitud "ignorante" de Occidente
Además, Lavrov sostiene que la situación actual en Oriente Próximo y en el Norte de África son un resultado directo de "una actitud ignorante y poco profesional" por parte de Occidente.
"En un esfuerzo por mantener su dominio, nuestros socios occidentales han actuado como un elefante en una cacharrería. En Irak, con falsos pretextos, se anunció la caída del régimen", explica. Así, según el ministro, esta situación es el resultado de la confrontación, del deseo de países concretos de liderar a cualquier precio y del desarrollo del policentrismo, es decir, la aparición de nuevos centros de poder.
Una llamada de atención sobre la violencia policial en EE.UU.
La violencia policial en EE.UU. contra los afroamericanos y la reacción de estos supone un aviso serio que los estadounidenses aún no han advertido, sostiene el ministro de Asuntos Exteriores.
"Lo que actualmente está ocurriendo con la violencia policial contra los afroamericanos y con la reacción de respuesta de los afroamericanos contra la estructura del orden público es un aviso serio. Obama ya se ve obligado a hablar de este tema en público. Es algo de lo que los estadounidenses aún tienen que darse cuenta", explica.
Las sanciones contra Rusia, relacionadas con propaganda antirrusa
Las medidas restrictivas introducidas contra la Federación de Rusia son en gran parte debidas a la propaganda antirrusa, ha declarado el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov. "Lo que ocurre con las sanciones está relacionado con la propaganda e incluso con la situación en Crimea", indica.