Una sorprendente historia ha circulado por las redes sociales conquistando a miles de usuarios. Hace poco más de una semana, la californiana Sharon Bertozzi encontró un pequeño animal encogido y escondido detrás de un jarrón de cerámica junto a la puerta de su casa. Según la página de noticias The Dodo, el animal ―que fue tomado por la mujer por un perro moribundo― había pasado allí al menos cuatro horas.
Bertozzi confesó que le "dolía el corazón" por el supuesto canino que no podía siquiera moverse, así que se comunicó con oficiales de City of Folsom Animal Services para que la ayudaran. La mujer se llevó una gran sorpresa cuando los especialistas descubrieron que en realidad no se trataba de un perro.
"A primera vista se pensó que era un perro viejo y que estaba muy enfermo", publicó el servicio en su página en Facebook. "Al tomar un mejor aspecto, resultó que era una coyote joven con un estado de sarna muy avanzado", explicaron.
Quienes rescataron al animal lo bautizaron como Princesa y lo trasladaron al refugio Gold Country Wildlife Rescue (GCWR) de Loomis (California) para que reciba tratamiento por la sarna y por una severa deshidratación. Se espera que el coyote permanezca allí durante unos meses hasta que se recupere totalmente y pueda ser liberado en su hábitat natural.