Hipo, bostezo, llanto... el porqué de las reacciones involuntarias de nuestro cuerpo
Tener cosquillas, sonrojarse, bostezar, tener hipo o que se nos ponga la piel de gallina son reacciones ajenas a nuestra voluntad. Estamos tan acostumbrados a las reacciones involuntarias de nuestro cuerpo que ni siquiera nos preguntamos por qué suceden. Según el portal Magnet, por muy raras que parezcan estas reacciones incontrolables, lo cierto es que todas tienen explicación.
¿Por qué bostezamos?
Sobre los bostezos hay dos preguntas muy claras. La primera se centra en la razón del bostezo. Según los últimos estudios, la principal causa está relacionada con la necesidad de enfriar el cerebro para mantener su funcionamiento al mejor nivel. La segunda pregunta es sobre su contagio: por qué cuando vemos bostezar a alguien sentimos ganas de hacer lo mismo. El bostezo es en este caso una respuesta instintiva de imitación como sistema de comunicación.
¿Por qué tenemos hipo?
Si hay algo que no pasa desapercibido es el hipo, una reacción que en muchas ocasiones puede ser molesta y desagradable. El gran culpable de ese incómodo espasmo es la irritación del diafragma. Esta membrana se encarga de subir y bajar para ayudar a los pulmones a inspirar y expirar. Cuando se produce una descoordinación entre la entrada del aire por la laringe y el ritmo del diafragma, este expulsa el aire, y es cuando oímos ese sonido característico del hipo.
¿Por qué lloramos cuando nos reímos?
¿Quién no ha llorado durante unas buenas risas? A todos nos ha pasado alguna vez, tras una emoción muy grande, un chiste muy bueno o un programa de televisión muy gracioso. Pero, ¿por qué lloramos cuando nos reímos? Hay dos teorías que pueden explicar este hecho. La primera está relacionada con que es la misma parte del cerebro la que se encarga de la risa y del llanto, e incluso lesiones en determinadas partes del cerebro provocan risa y llanto patológicos. Otra explicación apunta al hecho de que el temblor producido por una risa vigorosa ejerce presión sobre los conductos lagrimales.
¿Por qué nos sonrojamos?
El sonrojarse es una respuesta normal ante una situación imprevista, donde un comportamiento que hemos tenido o una situación nos provoca un sentimiento de vergüenza. La vergüenza es una reacción universal que se presenta en todas las culturas del mundo. Cuando nos avergonzamos, el cuerpo libera adrenalina, que actúa como estimulante natural y genera una serie de respuestas. Se acelera la respiración y el ritmo cardiaco, las pupilas se dilatan y la digestión se hace más lenta.
¿Por qué nos crujen los huesos?
A veces, al movernos escuchamos un ruido procedente de nuestros huesos o de alguna articulación como los hombros, las rodillas o el cuello. Lo lógico sería pensar que el crujido de los huesos está provocado por una fricción de los mismos, pero lo que escuchamos es una explosión gaseosa que se produce en el fluido sinovial y la percusión de dos estructuras duras entre sí.
¿Por qué sentimos pinchazos y cosquilleos?
Todos hemos sentido un pinchazo en las piernas tras tenerlas cruzadas durante demasiado tiempo o el cosquilleo acompañado del dolor que produce un golpe en el codo. Estas dos reacciones incontrolables del cuerpo son respuestas del cerebro sobre el estado natural de un nervio. Si los sometemos a mucha presión se desconectan, así que, al volver a la normalidad, el cerebro nos alerta de ello mediante esa sensación.
¿Por qué se nos pone la piel de gallina?
Cuando tenemos frío, nos emocionamos, sentimos miedo o vivimos una experiencia diferente a las comunes sentimos que la piel se nos pone de gallina. Esto nos pasa a todos los seres humanos en mayor o menor medida, pero, ¿por qué?
Según los científicos, heredamos la piel de gallina de nuestros ancestros como reacción a situaciones extremas. Muchos animales comparten este rasgo con nosotros. Por ejemplo, a los gatos se les eriza el pelo cuando se pelean o se sienten amenazados.
¿Por qué vemos manchas negras?
Estos puntos o manchas que vemos con frecuencia están en realidad presentes todo el tiempo. Se trata del líquido gelatinoso que rellena el espacio entre la retina y el cristalino, pero normalmente se mantiene estático en la parte inferior, por lo que no lo vemos siempre.
¿Por qué nos produce dolor de cabeza comer helado?
A mucha gente le sucede que, tras comer helado demasiado rápido, de repente sienten un dolor punzante en la parte frontal del cráneo. Una de las razones es que la sustancia fría entra en contacto con los nervios superiores de la boca. Otra de las razones es que el cerebro teme la llegada de ese frío a la cabeza y abre los vasos sanguíneos. El aumento del flujo de sangre hacia el cerebro es lo que provoca el dolor.
¿Por qué el zumo de naranja sabe tan mal después de cepillarnos los dientes?
Cuando te cepillas los dientes y luego bebes zumo de naranja, puedes comprobar que sabe a rayos, a metal, y no a zumo. Una sensación que no se percibe con otros alimentos. ¿Qué tiene de especial el zumo de naranja y la pasta de dientes?
El culpable es el laurilsulfato sódico, un detergente espumoso presente en la mayoría de los dentífricos. Esta sustancia colapsa temporalmente las membranas externas de las células gustativas y también altera algunos receptores.