La langosta apodada 'Larry', de casi 8 kilogramos y de entre 60 y 80 años de edad (aunque algunos creen que podría llegar a los 110), saltó a los primeros planos en EE.UU. tras ser rescatada por activistas de los derechos de los animales de un restaurante en Sunrise, estado de Florida, donde iba a ser cocida para una cena. El crustáceo estaba listo para recibir una nueva oportunidad de vida en un acuario en el estado de Maine. Sin embargo, la prensa local ha informado recientemente que 'Larry' ha fallecido durante el viaje y la causa habría sido un manejo descuidado durante la transportación.
La historia de la salvación de 'Larry' empezó cuando el dueño del restaurante, Joseph Melluso, contactó con la televisión local para mostrarle una langosta de un tamaño inusual antes de cocinarla. Esto llamó la atención del grupo de rescate de animales iRescue, que persuadió a Melluso de no cocinar al crustáceo. Asimismo, los miembros de la agrupación lograron reunir dinero para enviar la langosta a un acuario de Maine.
Larry the lobster rescued from restaurant, dies getting shipped to aquarium https://t.co/gZijXs5M4Bpic.twitter.com/ggpvS1xfnU— Gizmodo (@Gizmodo) July 29, 2016
El viaje debía tomar no más de 24 horas, pero los activistas tardaron 8 días en hacer llegar a 'Larry' a destino. La empresa FedEx se negó a transportarlo, y la langosta fue colocada en una pecera mientras los activistas preparaban un nuevo envío.
El crustáceo no fue preparado de manera adecuada, pues la caja en la que finalmente fue enviada carecía de suficientes bolsas de gel frío. "La langosta tuvo una ruta un poco tortuosa desde su origen", indicó Jeff Nichols, portavoz del Departamento de Recursos Marinos de la ciudad. "Era necesario rodearla realmente en paquetes de gel. Esta caja en realidad solo tenía tres".
El especialista observó que el crustáceo además fue "demasiado manipulado" y que "hubo algunas consideraciones que no se tomaron en cuenta respecto al manejo de un artrópodo vivo".
Por su parte, el dueño del restaurante sostuvo que lo sucedido era "muy decepcionante" y que es "un final feo para algo que tenía por detrás un montón de buena energía y buenas intenciones".