Los submarinos nucleares estratégicos rusos de clase Boréi son capaces de penetrar en cualquier sistema de defensa antimisiles debido a su armamento avanzado, dijo el viceprimer ministro de Rusia, Dmitri Rogozin, en un documental de la cadena Pervyi Kanal (Primer Canal).
"Estos misiles son una respuesta adecuada a cualquier sistema de defensa antimisiles, esté donde esté. No importa en qué océano quieran cercarnos, los Boréi romperán esta defensa", dijo Rogozin en un documental dedicado al Día de la Marina rusa.
Los Boréi están diseñados para transportar 16 misiles balísticos Bulavá, una versión naval del misil intercontinental Topol-M, diseñado específicamente para su lanzamiento desde submarinos. Tiene un alcance de 8.000 kilómetros y es capaz de dividirse en entre 6 y 10 ojivas hipersónicas independientes de alta maniobrabilidad, de 100 a 150 kilotoneladas cada una.
La Armada de Rusia planea operar un total de ocho submarinos de este tipo hasta el 2020. Los submarinos de propulsión nuclear de la clase Boréi han de convertirse en el pilar del componente naval de disuasión nuclear estratégica del país.
Más de 2.000 empresas rusas se dedican a la cooperación para la construcción de los submarinos de misiles balísticos, detalló Rogozin. El viceprimer ministro agregó que en la fabricación de los submarinos estratégicos rusos no se utilizan componentes fabricados en el extranjero.