La retórica absurda de las elecciones de EE.UU. culpa a Rusia sin pruebas

Desde Moscú etiquetaron de "estilo estadounidense" la práctica de echar la culpa en primer lugar y posteriormente investigar los hechos.

Varios medios de Estados Unidos han responsabilizado a Rusia del 'hackeo' de los servidores del Comité Nacional Demócrata sin aportar ninguna prueba que lo confirme. Moscú ha tachado de "absurdas" estas acusaciones y WikiLeaks, que hizo públicos los archivos, se negó a revelar sus fuentes y prometió nuevas filtraciones antes de las elecciones estadounidenses de noviembre. 

El 22 de julio, el sitio de filtraciones WikiLeaks publicó 19.252 correos electrónicos y 8.034 archivos adjuntos de los jefes del Comité Nacional Demócrata de EE.UU. Se trata de la primera parte de una nueva serie de filtraciones que implicaron a Hillary Clinton.

La revelación de WikiLeaks sacó a la luz correos electrónicos de dirigentes del Comité Nacional del partido con los que se maniobraba para evitar que Bernie Sanders alcanzara la candidatura presidencial.

La entonces presidenta del Comité Nacional Demócrata, Debbie Wasserman Schultz, tuvo que dimitir debido al escándalo que se desató tras la filtración y culpó a Rusia por los 'hackeos' y por supuestamente apoyar al candidato republicano, Donald Trump

Medios estadounidenses echan la culpa a Rusia sin pruebas

La máquina mediática de Estados Unidos no tardó en aferrarse a estas acusaciones con afirmaciones como: "La inteligencia de Rusia 'hackeó' los correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata" (NBC), "Aumentan las sospechas del origen ruso del 'hackeo' del Comité Nacional Demócrata" (Yahoo News), "Todas las señales apuntan a que Rusia está detrás del 'hackeo' del Comité Nacional Demócrata" (Motherboard), "Aumentan las pruebas que vinculan al 'hacker' del Comité Nacional Demócrata con Rusia" ('The Hill') y "¿Qué sabemos del rol de Rusia en el 'hackeo' del Comité Nacional Demócrata" (Politifact).

Sin embargo, nadie aportó pruebas reales. En su lugar, los periodistas recurrieron a insinuaciones como "parece que hay un amplio consenso entre los expertos y los profesionales de seguridad cibernética" (Politifact) de que Rusia está implicada de alguna manera.

Otros expertos citaron como 'prueba' de la participación de Rusia el hecho de que el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, presentó un programa de RT. Pero no tomaron en consideración que los 11 episodios de ese programa fueron emitidos hace cuatro años, en 2012.

Las reclamaciones de la participación rusa en el 'hackeo' de los ordenadores estadounidenses se remontan a mediados de junio, cuando aparecieron los primeros documentos filtrados en el blog del 'hacker' conocido bajo el nombre Guccifer 2.0. CrowdStrike, la empresa de seguridad cibernética contratada por el Comité Nacional Demócrata para investigar la filtración, apuntó a Moscú. Esa vez también sin prueba alguna. 

Moscú:"En Rusia investigamos antes de acusar"

Moscú rechazó las acusaciones de 'hackeo' tachándolas de "absurdas". El portavoz del presidente ruso, Dmitri Peskov, etiquetó de "estilo estadounidense" la práctica de primero echar la culpa y después investigar los hechos, según RIA Novosti.

"En Rusia estamos acostumbrados a investigar antes de acusar a alguien de cualquier cosa. Creemos que es lo más lógico y correcto", dijo Peskov.

El portavoz afirmó que "las declaraciones de la señora Clinton son una típica retórica preelectoral". "No hay nada tangible en sus acusaciones, y creemos que el carácter [de las acusaciones] es más bien emocional", agregó.

"La información filtrada es muy interesante, ya que demuestra acciones específicas para manipular la opinión pública durante la campaña electoral", remarcó el portavoz del Kremlin. "En este caso hay intentos de encubrir estas manipulaciones para demonizar a Rusia una vez más, lo que a nuestro juicio es inadecuado. Rusia no interfiere y nunca va a interferir en los asuntos internos –especialmente las elecciones– de otros países, incluido EE.UU.", indicó Peskov.

Assange: "No revelamos nuestras fuentes"

Por su parte, el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, dijo que las acusaciones del Comité Nacional Demócrata es un intento de desviar la atención del contenido de los documentos filtrados. En declaraciones a la CNN desde la embajada de Ecuador en Londres, donde solicitó asilo en junio de 2012, Assange rechazó las especulaciones de que Rusia estaba detrás del 'hackeo'. "Soy periodista. No revelamos nuestras fuentes", señaló.

A finales de julio, Julian Assange aseguró que la información referente a la participación de Rusia en la filtración es falsa. "No hay ninguna prueba. No revelamos nuestra fuente. Y, por supuesto, esto es una cortina de humo que se está moviendo desde la sede de la campaña electoral de Hillary Clinton", declaró entonces Assange.