Pruebas geológicas descubiertas por científicos confirmarían las leyendas chinas sobre una gran inundación que tuvo lugar hace unos 4.000 años y que habría dado origen a la dinastía Xia, la primera de su historia, y con ella al inicio de la civilización china.
Un estudio publicado en la revista 'Science' y dirigido por Qinglong Wu, de la Universidad Normal de Nanjing (China), apunta a que la inundación fue provocada por un desprendimiento de tierra en el borde de la meseta del Tíbet a causa de un sismo. Tal situación produjo un desbordamiento catastrófico del río Amarillo que, según afirman documentos históricos, fue controlado por el legendario emperador chino Yu mediante el dragado.
Los sedimentos antiguos analizados confirmaron el fenómeno natural y permitieron a los expertos situar alrededor del año 1.900 a. C. el comienzo de la dinastía Xia, un evento que hasta el momento era difícil de definir cronológicamente y del cual no se tenían evidencias científicas que apoyaran los antiguos relatos. Además de las pruebas geológicas, los arqueólogos que participaron en la investigación encontraron restos óseos humanos que dataciones por radiocarbono indican que pertenecieron a individuos que habrían sido víctimas de rocas arrastradas por las aguas.
Algunos historiadores dudan de la existencia de esta gran dinastía. Sin embargo, la inundación coincide con la época de la transición del Neolítico a la Edad de Bronce en el valle del río Amarillo y es compatible con los hallazgos arqueológicos de las culturas que pertenecieron a ella.
En otra publicación de 'Science', el experto David Montgomery, de la Universidad de Washington (EE.UU.), afirma al respecto: "Las grandes inundaciones ocupan un sitio central en algunas de las historias más antiguas del mundo y la inundación del emperador Yu ahora es otra de las historias potencialmente arraigadas a eventos geológicos".