El consorcio ruso Roselectrónika –que forma parte de la corporación gigante nacional Rostej– ha desarrollado un material de fibra de ferrita capaz de proteger los dispositivos electrónicos de los vehículos blindados y carros de combate modernos, así como los misiles antiaéreos y aviones de combate, de los efectos de la guerra electrónica, informa el rotativo ruso 'Izvestia'.
El director general de la compañía, Igor Kozlov, afirma que se trata de un material sin parangón a nivel mundial gracias a su bajo peso específico y alta flexibilidad, lo que le permite absorber totalmente las ondas del equipo de radioelectrónico enemigo.
"Al mismo tiempo su nivel disponible de absorción de ondas electromagnéticas es comparable a los análogos mucho más pesados y voluminosos que se utilizan en equipos electrónicos para protegerlos contra las armas de radioelectrónicas y prevenir su detección mediante captación de la radiación electromagnética que emiten.
"Hemos creado una 'capa' [protectora] para cualquier equipo bélico ruso y para las unidades en el campo de batalla del conjunto de equipo militar ruso contra armas de alta precisión modernas", destacó Kozlov.
La firma que ha desarrollado el material, Ferrit-Domen, ha explicado que la singularidad del material se debe a que hasta hace poco ni en Rusia ni en el resto del mundo se había creado un material con un peso específico tan bajo y con tales características de absorción de ondas. La tela de ferrita protege contra la radiación electromagnética en bandas de frecuencias entre 0,5 GHz y 50 GHz.
Además, el material puede reducir el nivel del campo electromagnético –en función del tipo de equipo que protege) a 10-30 dB (la radiación reflejada desde el material– y a 100 dB (radiación transmitida a través del material). Todo ello permite hacer a vehículos móviles en el campo de combate casi indistinguibles para las armas de precisión que son guiadas mediante distintos campos físicos: térmico, infrarrojo y electromagnético.
Según Kozlov, la fibra de ferrita garantiza la estabilidad de funcionamiento de cualquier equipo electrónico: ya se trate de un iPhone en manos de un soldado, de potentes tanques T-14 Armata o de radares de guiado de misiles del prometedor sistema de defensa aérea S-500 Prometéi.