El auto de procesamiento del titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Pamplona ha resultado duramente explícito en la descripción de la violación grupal ocurrida la madrugada del pasado 7 de julio en Pamplona, y ha revelado algunos detalles que aún no se habían hecho públicos. Entre ellos, se menciona que los cinco acusados "se animaban y jaleaban entre sí" reclamando su turno para abusar de la joven madrileña de 18 años. El auto también hace referencia a que el acusado A.M.G.E. "grababa con su teléfono móvil los hechos con el consentimiento de los demás, que se dirigieron en varias ocasiones a la cámara", lo que a juicio del magistrado implica que los hechos se cometieron "de forma colectiva y planificada, dentro de una dinámica grupal".
Otra duda aclarada es la cantidad de implicados en la violación. Fueron cinco, tal como revelan tanto las grabaciones de cámaras de seguridad exteriores como la grabación que hicieron los propios procesados. En este sentido, el auto también recoge algunas imprecisiones en el relato de la víctima, que habla de cuatro implicados y que se equivoca cuando describe la ubicación de los hechos y el recorrido que hizo junto a sus agresores.
No obstante, el magistrado considera que las declaraciones son "consistentes y coherentes desde su relato inicial a las personas que la encontraron llorando en cuanto salió del portal y a los agentes de la Policía Municipal de Pamplona que llegaron a atenderla en el primer momento hasta su posterior denuncia y declaración en sede judicial" y añade que "no cabe apreciar ningún consentimiento de la víctima". Tal como ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Navarra, para la valoración de los indicios de criminalidad el juez ha tenido en cuenta principalmente las mencionadas declaraciones de la víctima, coincidentes con el resultado de los análisis de las evidencias biológicas obtenidas, el visionado del vídeo realizado por los propios procesados y los datos del atestado inicial elaborado por la Policía Municipal de Pamplona y sus posteriores ampliaciones.
El auto del juez detalla que los agresores "agarraron a la joven por las muñecas y la obligaron a entrar al portal número 5 de la calle Paulino Caballero, rodeándola, y, valiéndose de su superioridad física y de la imposibilidad" de ella "para solicitar auxilio". Luego le robaron el móvil, en un acto que probablemente pretendía evitar que la víctima solicitase algún tipo de auxilio inmediato que pudiera incriminarles.
En el conjunto de los hechos, el juez destaca tres circunstancias agravantes: la primera es un trato degradante o vejatorio, pues se aprecia en la grabación "cómo los procesados se reían de la víctima, siendo además una vejación adicional el mero hecho de la grabación"; la segunda es "una actuación conjunta de varias personas" y la tercera que la víctima "era especialmente vulnerable, tratándose de una chica de 18 años que se encontraba sola".
La resolución impone a los cinco encausados una fianza de 500.000 euros, que el juez considera adecuada, sin perjuicio de su determinación final, a las circunstancias de "unos hechos de extrema gravedad". El texto explica también que se acuerda el encarcelamiento provisional atendiendo a "las elevadas posibilidades de eludir la acción de la justicia ante la gravedad de las penas que en su día pudieran imponerse". El auto de procesamiento puede ser recurrido ante la Audiencia de Navarra.
David Romero