La Policía alemana está investigando la muerte de 70 pacientes que pasaron por las manos del fundador de un centro oncológico de tratamiento alternativo en la ciudad de Braht (Renania del Norte-Westfalia), informa el periódico neerlandés 'De Verdieping Trouw'. Casi todos los fallecidos son ciudadanos de los Países Bajos, cuyas fronteras están muy cerca de la localidad.
La muerte de tres pacientes de Klaus Ross, de 60 años, en su clínica a principios de este mes de agosto llamó la atención de la Policía, recoge el portal Science. Los tres fallecidos consumieron un fármaco que está en fase experimental en la Universidad Johns Hopkins de Baltimore (Maryland, EE.UU.) y que de momento es conocido como 3PB. El Biological Cancer Centre, que es la denominación oficial de la clínica creada por Ross, ha sido cerrada provisionalmente aunque el galeno sigue aún en libertad.
Las autoridades han pedido a los familiares de los fallecidos autorización para exhumar sus cadáveres para poder conocer la causa exacta de las muertes. El objetivo es determinar si el fallecimiento de los 70 pacientes fue consecuencia del cáncer o del tratamiento que recibieron en la clínica.
Según la información disponible, los pacientes del apodado como 'el curador del cáncer' se dirigieron a Ross después de haber recurrido a varias opciones terapéuticas convencionales sin haber obtenido resultados positivos. El médico alemán les ofreció un curso de 'terapia básica' contra el cáncer de diez semanas por un precio de 9.900 euros.