Los habitantes del pueblo de Intikul, ubicado en la región de Krasnoiarsk, Rusia, se han visto invadidos por tarántulas que, al asentarse en las afueras de la localidad por razones desconocidas, han empezado a penetrar en los hogares, informan medios locales.
Los lugareños aseguran que arañas marrones y negras, de un tamaño de 3 centímetros, y que habitan mayormente en inmediaciones de un lago cercano, son activas por la noche, saltan a una altura de hasta 2 metros y su veneno es capaz de matar a una rata.
Al juzgar por las fotos, zoólogos sugieren que se trata de tarántulas pertenecientes a la familia de los licósidos, que hasta el momento no han sido vistas en la región. Las mismas no conllevan un peligro mortal para los humanos pero su picadura podría provocar fuertes reacciones alérgicas.
Según especialistas, el cambio climático ha provocado que los insectos comiencen a explorar activamente nuevos territorios que antes eran demasiado fríos para ellos, publica la edición de rusa de 'National Geographic'.