"He creado el 'burkini' para dar libertad a las mujeres, no para quitársela"

El 'burkini' no simboliza el islam sino el ocio y la felicidad, asegura la creadora de esta prenda, que denuncia que los políticos franceses "no son mejores que los talibanes".

Aheda Zanetti, la diseñadora australiana de origen libanés que creó el 'burkini', ha defendido en un artículo de opinión para 'The Guardian' la polémica prenda, que ha sido prohibida en varias ciudades francesas.

En su artículo, Zanetti relata que inventó el 'burkini' a principios de 2004 "para dar a las mujeres libertad, no para quitársela". Lo hizo porque su sobrina quería jugar al 'netball', pero lo tenía "un poco difícil" porque llevaba hiyab. 

"Fue creado para la integración y la aceptación, para la igualdad y para no ser juzgado"

La diseñadora australiana lamenta que se juzgue a todos los musulmanes "por unos delincuentes que no hablan en nombre de los musulmanes" y tampoco quiere que nadie juzgue a una chica por llevar 'burkini", ya que "no es más que una chica modesta".

El 'burkini' fue creado para "la integración y la aceptación, para la igualdad y para no ser juzgado", explica la mujer, que recuerda los "tiempos difíciles" en los que la comunidad musulmana "tenía miedo a salir", a ir a las piscinas y playas públicas, entre otras cosas.

Entonces, decidió diseñar algo para que las mujeres "tuvieran la confianza para seguir con una buena vida", algo "positivo" que pudiera llevar cualquiera: cristianos, judíos, hindúes.

"Solo es una prenda de vestir para una persona modesta, o alguien que tiene cáncer de piel o una mujer que acaba de dar a luz y no quiere usar bikini: no simboliza el islam", asegura Zanetti, agregando que lo que está sucediendo ahora en Francia le provoca tristeza y espera "que no sea a causa del racismo".

"¿Quién es mejor, los talibanes o los políticos franceses?"

"Creo que han entendido mal una prenda que es tan positiva —simboliza el ocio y la felicidad, la diversión, la forma física y la salud— ¿y ahora exigen a las mujeres que abandonen las playas y regresen a la cocina?", se pregunta Zanetti, y prosigue: "Esto ha dado a las mujeres libertad, ¿y ahora quieren quitarles esa libertad? Entonces, ¿quién es mejor, los talibanes o los políticos franceses? Unos son tan malos como los otros", afirma la diseñadora.

Zanetti confiesa que le encantaría estar en Francia para decir: "Ustedes han entendido mal y hay más problemas en el mundo de qué preocuparse".

La autora del artículo denuncia que los políticos han convertido "un producto que simboliza la felicidad y la alegría" en un "producto de odio", y asevera que esta prohibición podría provocar "una reacción violenta" porque se está dividiendo a la nación, se está repeliendo y aislando a la gente, algo que "definitivamente no es algo bueno para ningún político de ningún país".

En las últimas semanas los 'burkinis' han sido prohibidos en las ciudades francesas de Sisco, Cannes y Niza, entre otras localidades. Desde entonces al menos cuatro mujeres han sido condenadas a pagar multas de 38 euros por llevarlos.