'Una Red de engaños': ¿Por qué todo el mundo miente en Internet?

Un estudio sugiere que somos más sinceros en las redes sociales y que tendemos a decir más mentiras en los sitios web de encuentros sexuales.

Un estudio publicado en la revista 'Computers in Human Behavior' ha revelado que la norma en la Red es mentir respecto a nuestra verdadera identidad, informa la cadena CBC News.

Para llegar a esta conclusión, los investigadores examinaron cuatro medios de interacción en línea para evaluar si resultaban determinantes en el engaño: las redes sociales (Facebook, Instagram y Twitter), las páginas web de citas (Match.com y Yesca), salas anónimas de 'chat' y páginas web de encuentros sexuales.

Durante estas pesquisas, un 32 % de los encuestados afirmaron ser "siempre honestos" en estos cuatro apartados —en cabeza se situaron las redes sociales—, aunque solo un 0,2 % indicó que esperaba una total sinceridad del resto. "La razón es que las redes sociales tienen un más vínculos con el mundo exterior" y, por tanto, "resulta mucho más difícil mentir" acerca de aspectos como "el sexo o la edad" cuando "publicas tus imágenes propias o de tu familia y amigos", apunta Michelle Drouin, profesora de Psicología en la Universidad en Fort Wayne (Indiana, Estados Unidos) y coautora del estudio.

El experimento, en el que participaron 272 personas con una edad media de 32 años, concluye que las personas suelen ser menos sinceras en los sitios web de encuentros sexuales, donde un 90 % de los encuestados cree que los internautas han mentido alguna vez sobre su apariencia, y un 55 % estima que han faltado a la verdad en ocasiones sobre su sexo porque "quieren impresionar" y parecer "más guapos y más sexis" para aparentar que "su vida es mejor", indica Drouin.

Asimismo, existe una correlación entre nuestras expectativas sobre la honestidad de los demás y nuestra propia manera de actuar, a pesar de que resulta diferente mentir de manera espontánea en persona que elaborar un embuste más calculado 'online'.

En definitiva, el estudio sostiene que los internautas mienten para parecer más atractivos, preservar su privacidad o porque "todo el mundo miente en Internet".