Liberan a exestudiante de Stanford que violó a una joven y en su ciudad lo reciben con armas

El 2 de septiembre, el exestudiante y excampeón de natación Brock Turner, de 21 años, que había sido condenado a 6 meses de prisión por violar a una mujer inconsciente, consiguió la libertad condicional al cumplir la mitad de la condena, informa AP. El caso del joven y, en particular el juicio, que muchos consideraron como demasiado condescendiente, generaron polémica en EE.UU.

El hecho tuvo lugar el 17 de enero de 2015 durante una fiesta estudiantil en el campus de la Universidad de Stanford. Otros estudiantes encontraron a Turner intentando a abusar sexualmente de una joven que estaba inconsciente. A pesar de esto, el acusado afirmó que la víctima no había tenido nada en contra del acto sexual.

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Aunque el procurador pidió 6 años para él, el juez lo sentenció solamente a 6 meses de cárcel. Las palabras del padre de Turner, quien sostuvo que solo se trató de "una acción de 20 minutos", causaron mucha indignación.

Ahora el exestudiante planea regresar a Ohio a vivir con sus padres, pero su vida nunca será igual. Fue privado de su beca universitaria para realizar natación y no podrá visitar el campus de Stanford. Brock Turner enfrenta tres años de libertad condicional, tendrá que registrarse en la comisaría local y no podrá consumir bebidas alcohólicas ni drogas durante ese lapso de tiempo.

Lo más importante es que su nombre y foto aparecerán en el registro de delincuentes sexuales de por vida, lo que significa que no tendrá derecho a permanecer y vivir cerca de parques, escuelas y otros lugares en los que se congregan niños, y que la policía podrá visitarlo periódicamente sin previo aviso. Además, en caso de que Turner se mude, las fuerzas del orden enviarán notificaciones por correo a los vecinos, informándoles de que un delincuente sexual vivirá en el barrio.

Asimismo, en su ciudad natal lo recibieron activistas locales armados con versiones civiles de fusiles de asalto. Según un usuario de Twitter, portaban en sus manos carteles con inscripciones que instaban a castrar y matar a los violadores.