El ataque aéreo lanzado este sábado por la coalición liderada por EE.UU. contra las posiciones de los militares sirios que luchaban contra el Estado Islámico en la ciudad de Deir Ezzor no estaba planeado, informa el diario 'USA Today', citando a un alto cargo estadounidense que habló bajo condición de anonimato.
Al menos 62 militares leales al Gobierno de Bashar al Assad murieron en aquel bombardeo y un centenar más resultaron heridos. El ataque socavó además el alto el fuego declarado en Siria la semana pasada para poner fin a 5 años de hostilidades. Este lunes, Siria ha decidido no seguir con la tregua, esgrimiendo que los grupos rebeldes no han cumplido con lo acordado.
EE.UU. está investigando los bombardeos en Deir Ezzor, durante los que pilotos estadounidenses atacaron a los militares sirios en vez de a terroristas, aparentemente por error. Según la explicación ofrecida por el Mando Central de EE.UU., la coalición nunca atacaría de forma intencionada a las fuerzas armadas del Gobierno sirio.
El ataque ocurrió pese a que, en el marco del alto el fuego, Rusia y EE.UU. acordaron cooperar y compartir la información en Siria. Según 'USA Today', los bombardeos terminaron apenas Rusia informó a EE.UU. que estaban bombardeando militares sirios y no el Estado Islámico; lo que ocurrió en el minuto 55º de un total de 67 que los comandantes de la coalición asignaron a los pilotos para realizarlo.
¿Cómo pudo pasar esto?
El ataque aéreo no fue planeado, sino que tuvo un carácter 'dinámico', es decir, que fue dirigido contra un blanco improvisado. Normalmente tales blancos primero son investigados por aviones o drones de vigilancia para evitar daños colaterales, debiendo ser el ataque aprobado al menos por un general o un militar de rango superior. Sin embargo, la decisión puede ser tomada en cuestión de minutos, explica el diario.
Según la fuente del diario, este sábado en Deir Ezzor, la coalición estaba monitoreando las posiciones del Estado Islámico, muy presente en la zona y, eventualmente, atacó lo que pensó que eran sus posiciones, armamento y militar bélico que resultaron ser del Ejército sirio. EE.UU. no ha revelado cuantas bombas lanzaron sus pilotos.