El grupo de científicos de ScanPyramids, un proyecto lanzado para estudiar el interior de las pirámides egipcias, afirmó el 15 de octubre que descubrió dos cavidades desconocidas dentro de la pirámide de Keops, la más grande de Egipto, informa la revista 'Live Science'. Por su parte, el Ministerio de Antigüedades de Egipto confirmó el hallazgo de 2 "anomalías" y anunció que estudiará sus funciones y naturaleza.
Los expertos de ScanPyramids, apoyados por la Universidad de El Cairo y el Instituto de Innovación y Preservación del Patrimonio (HIP) de Francia, encontraron las cavidades utilizando métodos no invasivos, como la detección de muones, la termografía infrarroja o la fotogrametría. Según informa la revista, una de estas cavidades fue detectada en la zona superior de la pirámide y otra en la parte nordeste de la misma. Aún se desconocen los tamaños exactos de las cavidades, así como sus posibles funciones.
Sin embargo, el reciente hallazgo ya ha provocado escepticismo en el mundo arqueológico. Zahi Hawas, exministro de Antigüedades de Egipto y uno de los egiptólogos más famosos y controvertidos del mundo, afirmó a la revista 'Seeker' que en la pirámide no existen cámaras secretas y "que este tipo de anomalías tienen que ver con la forma en que la pirámide fue construida". Según han indicado múltiples egiptólogos, la pirámide, así como la tumba del faraón, fue construida para ser inviolable. Por lo tanto, es posible que las anomalías sean signos de obstáculos para proteger a los gobernantes de Egipto después de la muerte.
La pirámide de Keops, de 146 metros de altura, también conocida como la Gran Pirámide de Guiza o la Pirámide de Jufu, es considerada una de las siete maravillas del mundo antiguo y, al igual que otras pirámides en Egipto, fue diseñada como tumba para un faraón. El proyecto ScanPyramids, según su página oficial, aspira a descubrir nuevas pistas para entender cómo esta enorme pirámide fue construida en tan solo 25 años.