El candidato a la Presidencia de EE.UU. por el Partido Republicano, Donald Trump, ha asegurado que los nuevos correos de su rival demócrata, Hillary Clinton, que están siendo investigados por el FBI, pueden ser la prueba de atroces delitos, informa 'The Washington Post'.
Durante un discurso en Iowa (EE.UU.) en medio de sus seguidores, Trump afirmó que la investigación contra Clinton es el "escándalo político más grandedesde Watergate", en la década de 1970, y espera que "por fin" pueda hacerse justicia.
"El FBI no habría abierto nuevamente el caso en este momento de no tratarse de un atroz delito", expresó el republicano subrayando que Clinton ha intentado politizar la investigación atacando a la dirección del FBI con falsas acusaciones.
"La corrupción de Clinton está a una escala que no se había visto antes y no podemos permitir que lleve sus esquemas criminales al Despacho Oval [el despacho oficial del presidente de EE.UU.]"", aseveró el multimillonario.
Esta semana, el director del FBI, James Comey, envió a varios miembros del Congreso una carta en la que anunció que se investigarán nuevos correos del servidor privado de Hillary Clinton. Comey señaló que la entidad debe dar los pasos apropiados para determinar si los correos contienen información clasificada y evaluar su relevancia.
El origen del escándalo
Hillary Clinton se vio en el centro de las críticas por haber mandado correos con información clasificada a través de un servidor inseguro desde su casa de Nueva York entre 2009 y 2013, cuando ejercía el cargo de secretaria de Estado. Esta práctica habría podido permitirle ocultar sus correos a los investigadores, algo que los funcionarios tienen prohibido.
Las recientes filtraciones de Wikileaks revelaron que el presidente de EE.UU. sabía que la actual candidata demócrata había usado un servidor inseguro para mandar correos con información sensible pero dijo lo contrario a los medios.