La coalición terrorista de Jeish al Fatah (Ejército de la Conquista), que emplea a más de 16.000 combatientes en su llamada Gran Operación Épica, no ha logrado imponerse a las tropas gubernamentales en el oeste y el suroeste de Alepo, informa la agencia iraní FARS. Las fuerzas yihadistas han dejado de atacar este lunes las líneas defensivas del Ejército sirio.
La Gran Operación Épica es la última tentativa de los terroristas del Jaish al Fatah, que se encuentran en las afueras de Alepo, de ayudar a los combatientes sitiados en la parte oriental de la ciudad, señala la agencia. Los milicianos han admitido su fracaso afirmando a los medios que su operación "no logró cumplir el objetivo militar de la coalición de levantar el sitio de nuestros camaradas" atrapados en esa zona de la urbe siria.
Según los terroristas, "una calma relevante reina sobre los distritos del oeste y sudoeste de Alepo desde la tarde del lunes", mientras que sus medios afines informan de que "no se han reportado más ataques contra las posiciones del Ejército desde las últimas horas de esa tarde".
Los milicianos también se han quejado en sus publicaciones en las redes sociales de Abdullah Muhammad al Muhaysini, un importante clérigo vinculado a Al Qaeda y el líder religioso de la coalición Jeish al Fatah. Lo culpan del "resultado humillante" de la Gran Operación Épica en Alepo y de su "estrategia totalmente equivocada" para levantar el asedio de los milicianos que se encuentran en la ciudad. "Parece que al Muhaysini ha enviado a los miembros extranjeros de los grupos militantes al campo de batalla en Alepo para deshacerse de ellos", aseguró un miliciano en una opinión compartida.
El Ejército sirio y las fuerzas populares han llevado a cabo una ofensiva de una intensidad sin precedentes sobre Jeish al Fatah en el oeste y suroeste Alepo: el resultado es la expulsión de los terroristas de los pocos barrios y distritos que habían ocupado en los últimos días, señala FARS. Asimismo, la coalición de grupos militantes ha sufrido numerosas pérdidas entre sus filas en su ofensiva para rescatar a sus 'camaradas' de las áreas orientales de la urbe.