En una entrevista exclusiva realizada por el periodista australiano John Pilger (John Pilger Special), que será transmitida por RT el próximo sábado —por cortesía de Dartmouth Films—, el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, ha negado categóricamente que los correos electrónicos del Partido Demócrata de EE.UU. y de la aspirante a la Casa Blanca, Hillary Clinton, recibidos por su portal fueran enviados por el Gobierno ruso.
La campaña de Clinton ha sido capaz de proyectar "una histeria de neomacarthismo" en la que Rusia parece responsable "de todo", sostiene el fundador de WikiLeaks. En este sentido, Assange recuerda que Hillary Clinton ha declarado "falsamente" en varias ocasiones que 17 agencias de Inteligencia estadounidenses habían constatado que las autoridades rusas eran la fuente de nuestras publicaciones. "Eso es falso, podemos decir que el Gobierno ruso no es la fuente", subraya.
Assange, que concedió la entrevista en la Embajada de Ecuador en Londres, donde se encuentra refugiado desde hace cuatro años, también acusó a la candidata demócrata de ser un peón de intereses ocultos, y expresó dudas sobre su aptitud física para hacerse cargo de la Casa Blanca.
"Hillary Clinton es solo una persona. En realidad, siento lástima por Hillary Clinton como persona, porque veo a alguien que es comido vivo por sus ambiciones, atormentado literalmente hasta el punto en que se pone enfermo […] a consecuencia de seguir adelante y seguir con sus ambiciones", indicó Assange . "Ella representa a toda una red de personas, y toda una red de relaciones con Estados particulares", agrega.
Durante los últimos nueve meses WikiLeaks ha subido más de 30.000 correos electrónicos del servidor privado de Clinton, cuando era secretaria de Estado. Esta filtración fue seguida de unos 20.000 correos electrónicos enviados a y por miembros del Comité Nacional Demócrata de EE.UU., en los que quedaban de manifiesto la actitud despectiva hacia el también demócrata Bernie Sanders y su campaña. Finalmente, el pasado mes de octubre, el portal publicó más de 50.000 mensajes relacionados con John Podesta, jefe de la campaña electoral de Clinton.