La primera ministra del Reino Unido Theresa May no podrá recurrir al artículo 50 del Tratado de Lisboa para iniciar el proceso de salida del país de la Unión Europea sin la aprobación previa del Parlamento. La decisión del Tribunal Supremo indica que May no tiene derecho a utilizar la prerrogativa real en esta cuestión.
El dictamen jurídico afirma que se trata "solamente de una cuestión de derecho" y precisa que el Tribunal no expresa su opinión sobre las ventajas de la salida de la UE, lo que califica de "asunto político".
A principios de octubre la primera ministra británica había asegurado que el proceso de salida de la UE arrancaría antes de finales de mayo de 2017, con lo cual el Reino Unido abandonaría el bloque para la primavera de 2019, antes de las próximas elecciones generales.
El histórico referéndum sobre la permanencia o no del Reino Unido en la UE se celebró el 23 de junio. En la votación, que contó con la más alta participación desde la década de 1990, un 51,9% de los participantes lo hizo a favor del 'Brexit'.