Duró varios milisegundos, pero era tan brillante que los científicos consiguieron localizarlo. Tras un 'viaje' de al menos mil millones de años luz, una fuerte explosión de ráfagas rápidas de radio (FRB, por sus siglas en inglés) fue captada por el telescopio de alta precisión Parkes en Australia el año pasado.
Al analizar el fenómeno, los investigadores han conseguido revelar más información sobre la estructura de la red cósmica y han publicado los resultados de su estudio en la revista 'Science'.
Según uno de los autores, Ryan Shannon, de la Organización de Investigación Científica e Industrial de la Commonwealth (CSIRO), se trata del estallido más brillante desde que las ráfagas rápidas de radio fueron detectadas por primera vez, en 2001, informa el portal EurekAlert.
Su insólita intensidad ha permitido desvelar detalles únicos acerca de la red cósmica. Shannon desvela que han descubierto que el vasto espacio existente entre los distintos objetos del universo contiene un gas casi invisible y un plasma de partículas ionizadas.
"Es increíble cómo unos pocos milisegundos de datos puedan dar tanta información", comentó . El origen de esta ráfaga rápida de radio deja perpleja a la comunidad científica, pero los investigadores sostienen que es extragaláctico. Señalan a una galaxia denominada VHS7 como una de sus posibles fuentes.
Con los nuevos datos recabados, los científicos han conseguido medir el campo magnético entre la Tierra y la galaxia, lo cual podría aportar a un mejor entendimiento de la estructura del universo.