Apenas unos minutos después de despegar del Cosmódromo de Baikonur, la nave espacial de carga Progress MS-04 dejó de transmitir los datos de telemetría y luego se desintegró en la estratosfera. Según el portal Meduza, se trata de la segunda misión fallida de un Progress y la cuarta nave de carga que se ha perdido desde octubre de 2014. Se cree que la causa del accidente fue un problema en uno de los motores del cohete Soyuz-U, aunque aún se esperan datos oficiales.
La misión del Progress MS-04 consistía en llevar hacia la Estación Espacial Internacional (EEI) casi tres toneladas de carga que incluían:
- 705 kilogramos de combustible.
- 50 kilogramos de oxígeno.
- 420 kilogramos de agua.
- 1.200 kilogramos de comida.
- Un nuevo traje espacial de fabricación rusa.
- Frutas frescas.
- Un sistema de regeneración de agua y desechos biológicos.
- Un nuevo invernadero para el cultivo de diversas especies.
Sin embargo, se aclara que no existe peligro para los cosmonautas y astronautas tras el fracaso de la misión. Según los procedimientos de la EEI, la provisión de las misiones se planifican con un excedente de alimentos suficiente para cubrir una demanda de hasta unos 45 días después de su finalización. El oxígeno y el agua se regeneran, por lo que se considera que la pérdida más considerable han sido los equipos y las frutas frescas que iban a ser consumidas en la cena navideña de los astronautas.
Los próximos lanzamientos hacia la EEI están previstos para:
- 9 de diciembre, fecha en la que el carguero japonés Kountori-6 llevará 600 litros de agua y baterías.
- 22 de enero, se lanzará la nave espacial estadounidense SpaceX CRS-10.
- 1 de febrero, se enviará a la estación el carguero Progress MS-05 ruso.