El mando naval ruso parece haber aprobado el proyecto Líder para diseñar un nuevo destructor con "capacidad para operar en zona oceánica" y ya habría planteado sus requerimientos a la industria naviera del país, según ha asegurado Vladímir Pospélov, un miembro de la Comisión Militar Industrial de Rusia, durante el salón Exponaval 2016 que se celebra estos días en Chile, informa Interfax.
Pospélov ha explicado que los detalles relativos a la aprobación de este proyecto técnico están casi resueltos y que el diseño de la nave está definido. Así, la principal característica distintiva de Líder será "su pequeña sección trasversal de radar" y su "armamento universal".
Este nuevo buque tendrá una amplia gama de misiones, un hecho que define las características de sus armas. De este modo, el destructor recibirá varios misiles guiados dotados de lanzadores verticales, junto otro lote de misiles superficie-superficie, antisubmarinos y antibuques. Al mismo tiempo, su defensa aérea consistirá de varios sistemas de corto, medio y largo alcance, mientras que sus piezas de artillería serán igual de versátiles y podrán disparar tanto proyectiles convencionales como misiles guiados.
Vladímir Pospélov ha detallado que el Líder "estará equipado con un sistema versátil de detección y guiado, herramientas de guerra electrónica, un sonar buscador de submarinos, minas y saboteadores". Además, será poco visible para los radares enemigos, debido a la forma de su cuerpo y a su recubrimiento especial, que incluirá materiales que absorben las ondas de radio.
Este destructor tendrá un desplazamiento que rondará las 10.000 toneladas, alcanzará 30 nudos de velocidad, incluirá un hangar para dar cabida a dos helicópteros antisubmarinos y, gracias a su propulsión nuclear, tendrá un rango de acción solo limitado por las reservas de alimentos.
Anteriormente se supo que Rusia pondrá a prueba la planta de propulsión nuclear de este buque para los nuevos portaaviones del proyecto Shtorm.