Un tribunal de Blekinge (Suecia) ha condenado a un hombre de origen iraquí a seis meses de prisión porque difundió en su cuenta de Facebook unas imágenes en las que aparecía vestido de militar con una cabeza cortada en un plato, así como con cuerpos decapitados de supuestos terroristas del Estado Islámico.
Las instantáneas pertenecen a un video de 2015 y mostrarían los estragos de la guerra entre las fuerzas regulares iraquíes y los yihadistas. En su publicación, Raed Abdulkareem aseguró que formaba parte del Ejército de Irak.
La corte dictaminó que incluso las personas fallecidas están protegidas contra la violación de la dignidad personal, tanto por la ley sueca como por la Convención de Ginebra. Por su parte, la fiscal del caso sostuvo que "la presentación que hizo esta persona constituye un trato humillante y degradante" para las víctimas, un acto que supone "un crimen de guerra".
Antecedentes y expulsión
Durante el juicio, el condenado reconoció que era la persona que aparecía en las fotografías, pero alegó que no tuvo maldad al publicarlas y que, de hecho, le obligaron a posar.
Abdulkareem ya estaba cumpliendo una sentencia de 42 meses, debido a que en mayo fue detenido por robo. Los investigadores de ese delito descubrieron las imágenes en su teléfono celular y en un grupo cerrado de Facebook.
Cuando complete su condena, ese hombre tendrá que abandonar Suecia —había solicitado asilo en 2015— y no podrá regresar a ese país hasta 2026. Es la primera vez que un tribunal sueco considera como crimen de guerra la difusión de este tipo de fotografías.