La Comisión Europea ha demostrado que está dispuesta a jugar "duro" al nombrar al "hombre más peligroso de Europa" como jefe del equipo de negociaciones para hablar en nombre de Bruselas ante el Reino Unido respecto a los términos de su retirada del bloque, informa el diario 'The Telegraph'.
El acuerdo para la salida del Reino Unido de la UE se logrará como máximo "en octubre del 2018, para que todo sea refrendado por la Eurocámara y el Consejo en torno a marzo del 2019", dijo Michel Barnier, negociador jefe de la Comisión Europea esta semana en su primera rueda de prensa desde que en julio fuera nombrado para formalizar el 'Brexit'.
"Los terceros países nunca pueden tener los mismos derechos y beneficios que los Estados miembros porque no están sujetos a las mismas negociaciones. Las cuatro libertades son indivisibles, el menú a la carta no es una opción", señaló haciendo referencia a las intenciones de Londres de seguir formando parte del mercado único, pero sin asumir la libre circulación de personas.
¿Quién es Barnier?
Es un político francés de 65 años, conocido en el Reino Unido como el "hombre más peligroso de Europa". Entre 1999 y 2004, fue miembro de la Comisión Europea donde se encargó de la política regional. Además ha ocupado varios cargos ministeriales en su país, incluyendo el de Exteriores, Agricultura y Medio Ambiente, así como importantes cargos en la Unión Europea.
¿Cuáles serían sus prioridades en las negociaciones?
Es probable que sea un "rígido" negociador y adopte una posición dura para defender los intereses de la UE. Ha insistido en que Londres tendrá que aceptar el camino "sin excepción o matiz" si quiere mantener el acceso al mercado único europeo.
¿Qué dicen las personas de Barnier?
Nick Clegg, ex viceprimer ministro británico y ahora portavoz de los Liberal Demócratas de Reino Unido, considera que el nombramiento de Barnier "ha encendido las alarmas en Londres".
Sylvie Goulard, del Parlamento Europeo, citada por Bloomberg, afirma que será justo con Londres, sin embargo, su tarea es "representar los puntos de vista del resto de la Unión Europea, y no la de satisfacer al Reino Unido".
Olivier Guersent, un excolaborador de Barnier: "Su instinto es siempre que un buen trato es mejor que una mala confrontación, al mismo tiempo, si hay un enfrentamiento, tampoco es tímido. Puede ser un negociador rígido, pero justo".