Un aventurero trata de cruzar el Atlántico sobre una tabla de paddle surf

El aventurero y surfista sudafricano Chris Bertish inició el 6 de diciembre su intento de convertirse en la primera persona en cruzar el Océano Atlántico de pie en una tabla de paddle surf. Tras esperar varias semanas las condiciones metereológicas adecuadas para emprender la travesía, Bertish partió en Agadir Marina (Marruecos) el pasado martes.

Se dispone a superar la increíble distancia de 7.400 kilómetros en cuatro meses, pasando por las Islas Canarias y las Islas Vírgenes, hasta llegar a la costa estadounidense en Florida. Va a viajar solo y planea avanzar unos 50 kilómetros al día, principalmente de noche para evitar la exposición al sol, alternando cada dos o tres horas el descanso y el remo.

"Llevo escuchando que estoy loco durante toda mi vida, pero no querría vivirla de otro modo", confesó el aventurero, que añadió que siempre ha querido "ir más allá de los límites" porque, "es allí donde ocurre la magia", según contó a 'The New York Times'. Según estimaba antes de empezar el viaje, el 90% del desafío serán los primeros cinco días, cuando tenga que acostumbrarse a enfrentarse al viento y a las corrientes marinas, algo que ya ha superado de manera exitosa, a juzgar por su Twitter. Ahora "todo lo que necesito es vuestro apoyo", escribe, dirigiéndose al público.

No es la primera vez que alguien trata de cruzar el Atlántico en una tabla de paddle surf, pero todos los intentos han fracasado hasta ahora. Este mismo año, el francés Nicolas Jarossay emprendió esta misma ruta, pero una semana después de empezar su viaje tuvo que ser salvado por un grupo de rescate después de que su tabla volcara.

En cuanto al más que probable escenario de que se tenga que enfrentar a una tormenta, Bertish afirma que está preparado para ello. Su tabla puede ser estabilizada con anclas y paracaídas y está equipada con una una cabina para protegerse de la lluvia.

La embarcación, cuya producción costó 120.000 de dólares, es capaz de enderezarse automáticamente en caso de volcado. Además de un pequeño compartimento para dormir, dispone de un equipamiento para predecir el tiempo vía satélite y de todos los dispositivos necesarios para un viaje por el mar como radio VHF, sistemas GPS y paneles solares. El surfista tiene también a bordo unas cámaras GoPro  y un drone para documentar su viaje y compartirlo en las redes sociales, además de una guitarra para animarse en los momentos de soledad en la inmensidad del océano.