Oxfam a RT: "Más de un millón de personas siguen atrapadas en Mosul"

Un representante de la organización advierte de que "es difícil entrar" en la ciudad iraquí para entregar ayuda humanitaria a sus habitantes.

Las organizaciones humanitarias se enfrentan a serias dificultades para entregar ayuda a las personas en la región de Mosul en plena operación del Ejército iraquí contra el Estado Islámico, ha recordado a RT el director del departamento de prensa digital de la ONG internacional Oxfam, Kai Tabacek, de vuelta de una misión en el país de Oriente Medio.

"Desafortunadamente, es muy difícil para agencias humanitarias como Oxfam entrar en Mosul", ha explicado Tabacek, que regresó hace apenas un mes procedente del área de Erbil, que se encuentra a 90 kilómetros de distancia de Mosul. Tras casi dos meses desde el inicio de la operación para liberar a Mosul "más de 100.000 personas han huido de la ciudad y sus alrededores", ha afirmado este portavoz de Oxfam. "Aún más de un millón de personas siguen atrapadas dentro de Mosul y están en riesgo de ser víctimas de francotiradores o artefactos explosivos. Y es realmente importante que todas las partes en este conflicto proporcionen rutas de escape seguras para que esas personas se vayan", ha advertido.

Asimismo, Tabacek ha señalado que es crucial que todas las partes eviten el uso de armas pesadas dentro de la ciudad, debido a que ponen en peligro vidas civiles. El responsable de prensa digital de la ONG ha lamentado el hecho de que los yihadistas del Estado Islámico "utilicen a la gente como escudos humanos".

Sin embargo, la liberación de Mosul no acabará automáticamente la crisis humanitaria en la zona, advierte el responsable de Oxfam. "Más de 3 millones de personas fueron desplazadas en el norte de Irak. Y eso no es solo de Mosul, es una cifra total de otras áreas que han sido recapturadas en los últimos años. Esta es una crisis que no va a terminar pronto", ha concluido Tabacek.

Mosul fue capturada por el Estado Islámico en 2014 y posteriormente se convirtió en la autoproclamada capital de los yihadistas en Irak. La operación para liberar la localidad comenzó el 17 de octubre de este año con la participación de decenas de miles de militares iraquíes, fuerzas especiales y milicias. La misión también es apoyada por la coalición internacional liderada por EE.UU.