Es más fácil demonizar a Rusia que resumir objetivamente los resultados de la presidencia estadounidense: así ha declarado Dmitri Peskov, portavoz del presidente ruso Vladímir Putin, en relación con las acusaciones realizadas por Barack Obama en contra de Rusia, reporta la agencia TASS.
"Demonizar" es mucho más fácil que "explicar qué promesas se han cumplido, qué objetivos se han logrado, cuáles no, qué pasa con la seguridad o qué consecuencias catastróficas para el mundo han traído estas u otras decisiones de política exterior", comentó el portavoz.
Peskov había reconocido con anterioridad que Obama y Putin mantuvieron una conversación mediante una línea de comunicación secreta y que ambos habían tratado en varias ocasiones el tema de los ataques cibernéticos, de los que EE.UU. culpa a los 'hackers' rusos.
"Esto es absurdo. Todos estos cuentos sobre los ataques informáticos por parte de Rusia son puras historias" dijo Peskov, agregando que los presidentes de ambos países, tanto por teléfono como en persona, habían discutido el tema.
"El presidente de EE.UU. fue él que planteó este asunto, pero nadie de su Administración ha explicado claramente estas acusaciones ni ha dado pruebas al respecto", concluyó el secretario de prensa del mandatario ruso.