Al menos un hombre armado con un rifle de asalto, disfrazado Santa Claus abrió fuego esta Nochevieja en el prestigioso club nocturno 'Reina' en Estambul (Turquía), ubicado en la orilla del estrecho del Bósforo y muy cerca del puente homónimo. Mientras la Policía se preparaba para entrar al asalto en la discoteca, el atacante fue captado por las cámaras de vigilancia del local durante el ataque.
El ataque que se inició en torno a la 1 de la noche (hora local), y que ha sido calificado por las autoridades de atentado, se ha saldado con al menos 39 muertos, entre ellos 19 extranjeros, y 69 heridos. Dentro de la discoteca había entre 500 y 600 personas en el momento del ataque, según medios locales.
Según la versión oficial del ayuntamiento de Estambul, el atacante empezó a disparar en el exterior de la discoteca, abatiendo a un agente de policía que se encontraba en la entrada del local y a otra persona que se encontraba junto a él.
Según el dueño del club nocturno, el servicio de Inteligencia de EE.UU. había avisado del riesgo de atentados y de que debían reforzarse las medidas de seguridad, informan medios locales.
Varias horas después de que empezaran los disparos y de que las fuerzas de seguridad turcas sitiaran el club Reina, altos cargos de la Administración de Estambul anunciaron que el único atacante había sido abatido por la Policía. No obstante, poco después se afirmó que el atacante había huido del lugar en estos momentos se le busca.