Este viernes, los creyentes ortodoxos de todas las regiones de Rusia y de varios países del mundo celebran la Nochebuena, la víspera de la Navidad. Las celebraciones tienen lugar a pesar del frío anómalo que se estableció hace unas horas en Moscú. Las temperaturas que, como se espera, alcanzarán los -35ºC, no parecen disminuir el entusiasmo de los creyentes.
Por la noche, comenzando a las 23:00 de Moscú (20:00 GMT), el Patriarca de Moscú y Todas las Rusias,Kiril, dirigió la tradicional ceremonia navideña en la catedral de Cristo Salvador, ubicada en el centro de la capital rusa. El servicio religioso festivo consta de la Vigilia de Toda la Noche y la liturgia y suele durar unas cinco horas.
Durante todo el día 6 de enero los creyentes permanecen sin comer: es el punto final al ayuno de 40 días. El ayuno termina después del anochecer con la aparición de la primera estrella en el cielo, que simboliza la estrella sobre Belén en el momento del nacimiento de Jesús. Según el Evangelio, al verla los reyes magos de Oriente fueron a adorar al niño Jesús y le llevaron sus regalos. Después de acudir al servicio de la noche –el más importante de la jornada– los fieles realizan una cena festiva. La mesa de Navidad debe ser muy abundante. El plato central es el 'sochivo', una mezcla de granos de trigo, amapola, nueces y miel.
¿Por qué la Navidad rusa se celebra tan tarde?
La Navidad en Rusia se celebra el 7 de enero, ya que la Iglesia Ortodoxa sigue rigiéndose según el antiguo calendario Juliano, establecido en el año 46 a. C. por Julio César y basado en el movimiento del Sol para medir el tiempo. Este calendario tiene un retraso de 13 días respecto al gregoriano.
Junto a las Iglesias ortodoxas de Rusia, Jerusalén, Georgia y Serbia, los católicos del rito oriental celebran su fiesta el 7 de enero, ya que también siguen el calendario juliano, mientras que 11 de las 15 Iglesias ortodoxas del mundo lo festejan el 25 de diciembre.