"Por primera vez en la historia", el tráfico de combustible invierte su curso y fluye desde Guatemala hacia México, de acuerdo con el medio guatemalteco 'Prensa Libre'.
Durante una recorrido que 'Prensa Libre' hizo en la población de Tecún Umán, en el puente de paso Rodolfo Robles, habitantes del lugar les contaron que ya existen balsas que transportan combustible en sentido contrario al tradicional.
Un gerente de una concesionaria de Shell en Guatemala afirmó a 'Prensa Libre' que ante la "escasez experimentada en México debido a los bloqueos de la población", podría ser que pequeños comerciantes aprovechen y obtengan beneficio económico.
Sin embargo, no se ha percibido un aumento desmedido de la demanda de gasolineras en la frontera y se descartó un fuerte contrabando entre los dos países debido a que los precios son similares.
El desabastecimiento de gasolina en México ya había empezado antes de las protestas de la población. Y es que el aumento del 20% de los precios del combustible decretado por el Gobierno federal para este 2017 provocó, primero, compras de pánico en todo el país.
"Mientras tanto, el contrabando hormiga continúa a través del río y el de mayor cuantía y volumen pasa por los diversos pasos ciegos por donde transitan desde pequeños camiones hasta vehículos pesados", precisa 'Prensa Libre'.
Entre México y Guatemala hay al menos 54 pasos irregulares. El precio para que una persona cruce por balsa es de entre 5 a 10 quetzales (de 0,60 a 1,30 dólares) y por el río pasan también todo tipo de productos básicos como jabón, comida y hasta material de la construcción.En Tecún Umán trabajan alrededor de 1000 balseros en turnos rotativos de 24 horas.
"El problema del contrabando no es nuevo, aunque lo que asombra a analistas es que ni autoridades mexicanas ni guatemaltecas toman acciones para erradicarlo y se lleva a cabo a plena luz del día", concluye 'Prensa Libre'.