Indignación en las redes sociales tras conocerse que el dueño de 'Casa Pepe', un bar de carretera considerado un templo del fascismo y la dictadura, ha sido homenajeado con una calle con su nombre en Almuradiel (Ciudad Real), la localidad de 800 habitantes en la que se encuentra el establecimiento.
Juan Navarro Muñoz, que falleció hace tres años, era conocido por sus comentarios ultraderechistas, racistas y machistas. Sin embargo, su fama en España responde al hecho de haber convertido un bar de la A-4 (carretera de Andalucía) en un museo del franquismo: banderas con el símbolo del águila, retratos de Franco y de José Antonio Primo de Rivera, productos rubricados con el yugo y las flechas falangistas, así como un sinfín de símbolos antidemocráticos que permanecen todavía hoy en el local al marcen de la Ley de Memoria Histórica.
Ahora, este polémico hostelero tendrá una calle en Almuradiel gracias al voto favorable de los dos concejales del Partido Popular (PP) y la abstención de los dos ediles de Ciudadanos, según informa 'eldiario.es'. El Partido Socialista (PSOE), que gobierna en la localidad en coalición con Ciudadanos, votó en contra, pero la alcaldesa se encontraba de baja en el momento de la votación por una grave enfermedad, por lo que solo un concejal socialista pudo votar en contra de la propuesta, que partió de una asociación vecinal.
Sin embargo, y pese a su baja médica, la alcaldesa acudió al pleno, celebrado en diciembre, y proyectó un vídeo en el que se mostraban algunas de las frases más polémicas de Navarro Muñoz para pedir a los concejales que reflexionasen antes de votar. "Las mujeres deberían estar en la cocina, haciendo los deberes de la casa", "Hitler o Franco, uno de los dos haría falta ahora en España" o "Yo no sueño con Franco, yo sueño con niñas de 18 a 20 años… Ya sabes el dicho, a gato viejo, rata tierna", son algunas de las declaraciones del hostelero que se mostraron en las imágenes.
Sin embargo, el vídeo mostrado por la alcaldesa no sirvió para nada. Según declaraciones recogidas por el citado medio, los concejales populares han defendido que al dueño de 'Casa Pepe' se le concede una calle "por su condición de vecino, no por nada de Franco ni esas cosas...". Mientras tanto, desde Ciudadanos justifican la abstención porque no les parece "ni bien ni mal la propuesta". No obstante, la alcaldesa, que se reincorporará en los próximos días a su puesto, todavía espera revertir la decisión.
La medida ha sido duramente criticada por asociaciones de víctimas del franquismo y por los usuarios de las redes sociales. "La exaltación del fascismo no es que no sea delito, es que la promueven las instituciones", ha comentado un usuario.
La exaltación del fascismo no es que no sea delito, es que la promueven las instituciones. https://t.co/saWSlkMtmz— EstebanCB (@EstebanCagnadas) 24 de enero de 2017
Otros usuarios han comparado la decisión del Ayuntamiento con los casos de tuiteros acusados o condenados por delitos relacionados con la humillación de las víctimas de ETA.
Si haces chistes sobre ellos vas a la cárcel, pero si montas un templo en su honor te ponen una calle. #Españahttps://t.co/ZvSZKaxQHq— Dani (@SrTumbado) 24 de enero de 2017
Otros tuiteros han comparado la España franquista con la Alemania nazi.
¿Y a Hitler un monumento?El dueño del bar franquista Casa Pepe recibe una calle gracias a PP y CDs https://t.co/FVRf8H9x78 vía @eldiarioes— Amparo M R (@AmparoRico) 24 de enero de 2017
Este señor en Alemania estaría en la cárcel por apología del fascismo, aquí los fascistas le ponen una calle https://t.co/vP02evXfAb— laquintacolumna (@laquintacolumna) 24 de enero de 2017