El Ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia ha anunciado que el esperado avión Il-76 aterrizó en Santiago, Chile este 30 de enero y ya se encuentra combatiendo los incendios forestales que están azotando a ese país, según informó un portavoz a RIA Novosti.
Justo luego de su viaje intercontinental, el avión se dirigió a extinguir incendios en coordinación con las autoridades chilenas. La aeronave se encuentra operando sobre la poblada región de Portezuelo.
Esta aeronave lleva en servicio desde 1971, fue diseñada para vuelos de carga y comercial de mercancías y es capaz de arrojar más de 42 toneladas de agua a la vez sobre focos de incendios. Además, su tripulación cuenta con enorme experiencia en extinción de incendios en condiciones de mala visibilidad y denso humo.
El Il-76 pesa más de 157 toneladas, consta de cuatro motores que ejercen una fuerza de unos 48.000 kilopondios y puede volar a más de 850 kilómetros por hora a una altura de unos 13.000 metros, con una autonomía de vuelo de 5.000 kilómetros. En su camino a Chile, este aparato recorrió más de 15.000 kilómetros, atravesó los espacios aéreos de 16 países e hizo escalas en Marruecos, Cabo Verde y Brasil.
Más de 15 naciones ayudan a la nación andina a combatir los peores incendios de su historia, entre ellas Colombia, Perú, Argentina, México, España, Portugal, Estados Unidos y China. Las llamas, que han arrasado casi 500.000 hectáreas de siete regiones de ese país latinoamericano, se han cobrado la vida de 11 personas y han dejado miles de damnificados.