¿Beber o boicotear? Trump desencadena la 'guerra del café'

La cadena de cafeterías Starbucks anunció la contratación de miles de refugiados en todo el mundo, y esto ha desatado tanto elogios como críticas en EE.UU.

Ante la "preocupación profunda" por la orden ejecutiva de Donald Trump que restringe la entrada de inmigrantes de siete países predominantemente musulmanes, la cadena internacional de cafeterías Starbucks anunció un plan para contratar a 10.000 refugiados en un plazo de cinco años.

Pero la respuesta en EE.UU. ha sido, como mínimo, burbujeante: la voluntad de Starbucks de "redoblar el compromiso" en la ayuda a refugiados que "huyen de la guerra, la violencia, la persecución y la discriminación" ha sido interpretada por muchos como una aparente preferencia hacia la contratación de refugiados, y con el 'hashtag' #BoycottStarbucks llaman a boicotear este proyecto.

Los que se oponen a este plan argumentan que hay miles de veteranos de guerra que viven en las calles y que se suman a la ya de por sí alta tasa de desempleo en EE.UU. Sin embargo, ese es solo uno de los 75 países en los que se realizarán estas contrataciones, según especificó la compañía.

En perspectiva, la empresa cuenta con más de 24.000 establecimientos a nivel mundial, según se indica en su sitio. Usuarios que han visto con buenos ojos esta medida tildan a los opositores como antiinmigrantes e incluso xenófobos y racistas, e instan a consumir los productos Starbucks con el 'hashtag' #Drinkstarbucks ('bebe Starbucks').