La Policía de Malasia ha anunciado este miércoles que otros dos sospechosos de participar en el asesinato de Kim Jong-nam, han sido identificadas y se encuentran en territorio de Malasia, informa AP. Uno de ellos es un alto funcionario de la Embajada norcoreana en el país, mientras que el otro es un empleado de la aerolínea nacional norcoreana Air Koryo.
La Policía se ha dirigido a ambos sospechosos para someterlos a un interrogatorio. El jefe de Policía Khalid Abu Bakar ha afirmado que el diplomático sospechoso tiene rango de segundo secretario en la Embajada, según medios locales.
Seúl acusa en voz alta al líder norcoreano
Ese mismo día militares de Corea del Sur realizaron una serie de anuncios trasmitidos a través de 34 altavoces instalados a lo largo de la frontera entre ambos países para "informar a los soldados y civiles coreanos que su líder Kim Jong-un está detrás del asesinato", según dijo un alto militar a la agencia Yonhap News.
El medio afirma que esta medida fue tomada para "subrayar la brutalidad del líder dictatorial de Pionyang" y la califica como "un medio crucial de guerra psicológica".
La agencia recalca que Corea del Sur ya ha utilizado altavoces en otras ocasiones para trasmitir mensajes en los que subrayó sus éxitos económicos y "los beneficios de la democracia liberal", al mismo tiempo que pidió prestar atención a la importancia de los derechos humanos, mientras que Pionyang los tacha de "amenaza" para su sistema comunista.
El pasado 13 de febrero Kim Jong-nam, medio hermano del líder norcoreano, Kim Jong-un, fue asesinado en Malasia. Según la policía, una mujer desconocida se le acercó en la sala de embarque del aeropuerto internacional de Kuala Lumpur y le cubrió la cabeza con un pañuelo que contenía un líquido no identificado y que le causó escozor en sus ojos. Pese a recibir la ayuda médica, Kim Jong-nam murió camino al hospital.