Las cortes de EE.UU. temen posibles infiltrados del 'El Chapo' en su juicio
Todos aquellos extranjeros que busquen colaborar en la defensa de Joaquín 'El Chapo' Guzmán deberían ser investigados y aprobados por las autoridades de Estados Unidos antes de participar en el juicio, según lo exigen los fiscales que llevan el caso contra el narcotraficante más poderoso de México.
Los litigantes temen que alguno pueda ser un infiltrado del cártel de Sinaloa enviado para conocer quienes participan en el proceso contra 'El Chapo' y, eventualmente, intimidarlos e incluso amenazarlos a ellos o a sus familias, indica un reporte de Univisión.
'El Chapo' afronta acusaciones en seis cortes federales de Estados Unidos por una veintena de crímenes. La primera de ellas se remonta a 1995 y afecta a otras 22 personas.
La investigación sobre los participantes extranjeros en el caso de 'El Chapo' fue solicitada por el fiscal Robert Capers en una carta dirigida al juez Brian Cogan. "La difusión de este conocimiento supone un significativo riesgo de seguridad. Por ejemplo, si ese miembro del cártel viajó a Estados Unidos y conoce la identidad de un testigo que coopera en México, él o ella podría viajar a México con ese conocimiento", indicó Capers en el escrito.
El fiscal, reconocido por su dureza, lleva entre otro casos los relacionados con las bandas criminales denominadas 'maras', o también con el tráfico de personas con fines de explotación sexual.
En respuesta, los abogados de Joaquín 'El Chapo' Guzmán, Michael Schneider y Michelle Gelernt, sostienen que la medida sería una "carga insuperable" para la defensa en la investigación de los cargos. El capo, extraditado de México a Estados Unidos el pasado 20 de enero, llegó a ser considerado el fugitivo número 1 por su influencia como líder de la organización de tráfico de drogas que opera en el mundo. Incluso llegó a formar parte de la lista de los hombres más ricos del mundo elaborada por la revista Forbes.
'El Chapo' escapó dos veces de prisión y, tras la última recaptura, los trámites para extraditarlo a Estados Unidos fueron más ágiles. Otros miembros de su cártel han sido o son procesados en ese país, si bien la mayoría se ha convertido en testigos, reduciendo de esa forma sus sentencias.