El presidente de EE.UU., Donald Trump, durante un discurso ofrecido este martes en la conferencia del Sindicato Nacional de Constructores se comprometió a "traer de vuelta puestos de trabajo y el sueño americano".
"No soy y no quiero ser el presidente del mundo. Soy el presidente de Estados Unidos y a partir de ahora Estados Unidos estará en primer lugar", anunció Trump ante la multitud y señaló a cada sindicato de la construcción, lo que provocó una ovación de los grupos de trabajadores que representaba.
"Ustedes son la columna vertebral de EE.UU., con el talento en esta sala podemos construir cualquier ciudad en cualquier momento y podemos construirla mejor que nadie", agregó el presidente estadounidense.
El fin de la era de la "rendición económica"
En un discurso de aproximadamente 30 minutos Trump cubrió temas variados: desde el papel de los sindicatos en la reconstrucción de Nueva York tras el 11 de septiembre, a la pérdida de 70.000 empleos industriales en la última década.
El mandatario aseguró que la época de la "rendición económica" ha terminado y que una nueva era de la victoria americana ya está cerca. En ese sentido, prometió otorgar a los trabajadores estadounidenses "las condiciones justas que merecen".
Asimismo, Trump criticó a los líderes estadounidenses del pasado por escuchar a "consultores equivocados" en lugar de escuchar al trabajador estadounidense, permitiendo de esa manera que sus empleos fueran transferidos al extranjero. "Washington y Wall Street han hecho muy, muy bien para sí mismos", apuntó el presidente Trump. "Ahora es su turno y van a compartir la riqueza", concluyó el líder estadounidense.