La Administración del presidente sirio, Bashar al Assad, ha condenado el ataque estadounidense contra la base aérea siria de Shayrat (Homs) y ha subrayado que Washington "ataca a los Estados", "subordina a los pueblos" y "trata de establecer su hegemonía en el mundo".
"El ataque contra el aeródromo de un país soberano explica claramente, una vez más, que el cambio de administraciones en este régimen no cambia su política, que se expresa, básicamente, en atacar a los Estados, subordinar a los pueblos y tratar de establecer su hegemonía en el mundo", ha comunicado el servicio de prensa.
"Si el régimen estadounidense pensaba que con este ataque podría apoyar a sus aliados en los grupos terroristas, Siria afirma que este ataque solo ha reforzado la determinación de la república en la lucha contra los terroristas", añade.
Ataque "irresponsable"
Asimismo, desde la Administración del mandatario sirio se señala que EE.UU. ha actuado de manera "miope" e "irresponsable" al fijar una base siria como blanco de su ataque.
"La Oficina del presidente sirio hace hincapié en que la acción de Estados Unidos es frívola, irresponsable, miope... Se han visto ingenuamente arrastrados a ello debido a una campaña de propaganda falsa", apunta.
- Las autoridades estadounidenses han lanzado 59 misiles de crucero tipo Tomahawk en torno a las 4.40 horas de este viernes hora local siria contra la base aérea del Ejército sirio de Shayrat, en la provincia de Homs.
- El ataque ha sido llevado a cabo desde dos destructores, el USS Porter y el USS Ross, que se encuentran en el Mediterráneo.
- El bombardeo de Washington ha provocado graves daños materiales a la base aérea siria, según ha explicado el Ejército de Damasco.
- Seis militares sirios han perdido la vida tras el ataque, según el Estado Mayor sirio.
- El ataque ha tenido como objetivo la instalación militar desde la que, según estimaciones de la Casa Blanca, las fuerzas del Gobierno sirio llevaron a cabo el ataque químico contra la localidad de Jan Sheijun, en la provincia de Idlib.
- Sin embargo, todavía ni la ONU ni la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) han reportado los resultados de su investigación sobre el suceso.