Los organismos de seguridad rusos han lanzado en la capital del país un operativo antiterrorista de gran escala llamado Anakonda, que tiene por objetivo localizar terroristas, armas, explosivos y otras sustancias prohibidas, informa el portal ruso RBK.
En la operación, se están llevando a cabo inspecciones en diferentes puntos de aglomeración de personas como estaciones de ferrocarriles o de metro, que durarán hasta el 11 de mayo.
Asimismo, se ha reforzado el control de todos los vehículos que entren en la capital y en la provincia de Moscú desde el 5 de abril hasta el 11 de mayo.
Según informa RBK, citando a fuentes de los aeropuertos de Moscú y San Petersburgo y de la Agencia de Energía Atómica nacional, desde el ataque terrorista del 3 de abril en el metro de San Petersburgo, que segó la vida de 14 personas, se han reforzado las medidas de seguridad en los medios de transporte y en las instalaciones nucleares de todo el país.