El martes 25 de abril, el argentino Francisco Cavelli denunció a la Policía que al regresar a su casa en México encontró a su novia muerta en el interior de una caja de cartón y en posición fetal.
La víctima se llamaba Cintia Vanesa González, una mujer de 29 años de la misma nacionalidad que trabajaba desde hace un año en la localidad turística de Playa del Carmen, situada en el sureste del país, al sur de Cancún.
A pesar de ser el novio quien denunció los hechos, la Policía se lo llevó detenido considerándolo como sospechoso del crimen, pero decidió liberarlo el jueves. De acuerdo al portal mexicano Proceso, la causa quedó a cargo de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo.
Desde que se supo la noticia, los familiares y amigos de Cintia defendieron la inocencia de Cavelli y señalaron como sospechoso a otro hombre. Carmen Benítez, prima de la víctima, contó al diario 'Clarín' que la pareja le había alquilado una habitación a un mexicano que decían que "se iba a quedar dos días".
"Esta persona necesitaba hospedaje en Playa del Carmen", comentó, añadiendo que ahora este hombre "no aparece, les robó plata y los documentos. Sospechamos que fue este chico mexicano".
Asimismo, BigBangNews también informó que otros familiares de Cintia habían asegurado que la noche del crimen se encontraba en la casa "otro chico mexicano que, después del hecho, desapareció y no lo están buscando".
Esta hipótesis fue planteada también por el portal argentino Minutouno, que publicó que "hubo una discusión horas antes del homicidio", debido a que el inquilino "habría metido a otro hombre en la casa, cosa que no había sido acordada con el alquiler. Horas más tarde se fueron todos menos Cintia".