"La crisis norcoreana está orquestada por Washington", indica en su blog el economista y periodista estadounidense Paul Craig Roberts. "Corea del Norte, que no ha atacado ni invadido ningún país en 64 años, carece de la fuerza militar para atacar a ninguna nación, como Corea del Sur y Japón, que están protegidos por Estados Unidos", añade el experto, subrayando que, además, "China no permitiría a Corea del Norte iniciar una guerra".
Tomando en consideración estos datos, Roberts se pregunta cuál es la razón de "la demonización de Corea del Norte por parte de la Administración Trump". Según el periodista, la situación es semejante a la demonización de Irán, ya que —explica— la 'amenaza iraní' fue orquestada por EE.UU., que la utilizó como excusa para instalar bases de misiles antibalísticos cerca de las fronteras de Rusia.
Un misil antibalístico (ABM) va destinado a interceptar y destruir ICBM (misiles balísticos intercontinentales) con armas nucleares y a evitar que alcancen sus objetivos. Washington afirmó que las bases anti-ABM no iban dirigidas a Rusia, sino que servía para proteger a Europa de los ICBM nucleares de Irán. Algunos estadounidenses podrían haber creído esto, pero los rusos, según Roberst, seguramente no lo hicieron porque Irán no tiene ni ICBM ni armas nucleares.
"El Gobierno chino tampoco es estúpido y entiende que la razón de la crisis norcoreana es la de proporcionar una tapadera para que Washington coloque misiles antibalísticos cerca de la frontera con China. En otras palabras, Washington está creando un escudo contra represalias de Rusia y China ante un ataque nuclear por parte de Estados Unidos contra ambos países", explica el periodista.
Así las cosas, Roberts se pregunta si "ahora que Rusia y China entienden que Washington se está preparando para un ataque nuclear preventivo contra ellos […], ¿se sentarán los dos países y esperarán el ataque?"